Tarde de Metal en Madrid con la visita de la interesante banda canadiense Lutharo a la Sala Silikona del barrio de Moratalaz, para alguno lejano y para otros muy cerca de nuestras casas. A los canadienses los acompañaban dos bandas de Madrid, que luchan por abrirse hueco como son los ya veteranos Vanagloria y los pujantes Unnamed, con disco recién estrenado.
Como ha sido la tónica durante el verano, tarde calurosa en Madrid, que invitaba más a estar de terraceo, que meterte en una sala de conciertos. Aún así hubo ambiente durante el concierto y estimo que unas sesenta personas vivimos en directo el concierto de las tres bandas.
Una tarde marcada por los problemas técnicos, sobre todo de sonido que impidieron que los conciertos fueran como tenían que ir, con la incomodidad por momentos de los músicos sobre el escenario. Unos problemas, que a veces son achacables a la Sala y sus condiciones (que por lo que nos comentaron sus responsables, van a subsanar en breve) y a veces a los músicos, que con su afán de llevar siempre las últimas tecnologías, se nos puede escapar correctamente su funcionamiento. Pero a lo que fuimos fue a disfrutar de tres bandas, de una tarde de Metal y estar con los amig@s para vivir un concierto en las mejores condiciones.
Con un ambiente algo frio, con el público entrando a la sala, el retraso en las pruebas de sonido hizo que Unnamed subiera al escenario cuando la gente aún estábamos entrado a la Sala.
Un grupo que en 2020 publicó su álbum debut, “Oscuridad”, comandado por su activa vocalista Vero Díaz, que durante el concierto demostró su poderío vocal y su empeño por agradar al público, con su cambio de atrezzos. Si hay que poner algún pero a su actuación era el excesivo efecto en su voz, que creo que no le resultaría necesario.
Un concierto que abrieron con “Oscuridad” el tema que da nombre a su disco, Metal actual, con mucho protagonismo de las guitarras y las voces melódicas de Vero, mucho cambio de tiempo y gusto por las melodías más claras, que fueron muy bien recibidos por sus seguidores.
El sonido no fue bueno y en las siguientes canciones se notó, “Terrorismo Irracional” no termino de sonar bien y en su tercer tema, “Mi Invocación”, tuvieron que parar la canción, hasta que el cable rebelde volvió a su posición correcta. Una canción con el grupo enmascarado sobre el escenario, en los constantes atrezzos que fueron sacando en cada canción. Una vez resueltos los problemas técnicos el grupo de asentó y acabó con Vero en la pista cantando con su público.
El show continuaba con Unnamed desgranando las canciones de su primer disco. Era turno para la dinámica “El Niño”, “Destruye Represión” con las voces más crudas y quizá uno de sus temas más directos y que más llegan, que quedó algo deslucido por el pobre juego de luces que sufrieron durante su concierto.
Una dedicatoria especial para las chicas presentes en el concierto antes de abril con “Esencia de Mujer”, con una muñequera en el brazo de Vero que parecían las luces de navidad, que volvió a mostrar el contraste de voces crudas del guitarrista y su cantante. Volvían los acoples con la versión del “Enjoy The Silence”, de Depeche Mode, que levantó algo más a un público que conocía la canción y que canto junto a Unnamed.
Quedaba poco para finalizar su show, cuando el batería y su redoble, un tiempo más pausado, daba paso a “La Lucha” que fue acompañado por las palmas de un público al ritmo de la canción, su tema más sentido.
Llegaron los momentos de agradecimientos y presentaciones para interpretar “Erradicando”, un tema muy dinámico, con un riff característico y que precedía al tema final “No Lo Quieres Hacer”, con Vero de nuevo entre el público cantando.
Se hizo entretenido el show de Unnamed, por su variedad, interacción con la gente y sobre todo las ganas de agradar, que se trasmiten a la gente.
Los siguientes en salir al escenario fueron Vanagloria que venían a presentarnos su quinto trabajo y que pese a las adversidades, salieron a darlo todo, con su sonido potente que mezcla el Thrash Metal y el Metalcore, en el que destacan las atmósferas oscuras, además de distintos pasajes con tintes electrónicos.
Los madrileños arrancaron su actuación con su tema “Afectados del Olvido” donde ya nos dejaron patente que se iban a dejar la piel para hacernos disfrutar de la mejor manera posible de su propuesta musical, animando al personal a participar desde el primer minuto.
Los temas de Vanagloria además de ser potentes y cañeros tienen un mensaje detrás, para hacernos reflexionar, por lo que su vocalista Luis M. Merino nos los fue introduciendo uno a uno antes de comenzar como hizo con “Letargo” donde destaco el papel de las guitarras y la potencia vocal de Luis, siguiendo tras la misma con “Proceso Irreversible” que habla de cómo unos malvados llegaron donde un pobre hombre y le quitaron todos sus cultivos. Tema rápido, con riffs afilados.
Como era la tónica de la velada el sonido no les acompaño, desluciendo un poco su labor, pero eso no impidió que los madrileños nos demostraran su buen hacer en el escenario, haciendo que sus fans congregados en la sala, disfrutaran cada uno de los temas, cantándolos y moviéndose con ellos, como vimos en “Estantiga”,con un estribillo pegadizo, que mezcla el castellano y el gallego, donde tuvieron algún problemilla técnico rápidamente solucionado seguida de “Nunca es Suficiente” en el que hablan de “un hombre que un día quiso hacerse con el poder del mundo y que no se lo podemos permitir”. Corte en el que destacó el papel de la batería de Raúl, siguiendo sin mucha tregua con “Piensa Dos Veces”, Epitafio” que habla de la vida después de la muerte, en donde Luis se bajó a cantar entre el público animando un poco más al personal y “El ascenso de la Maldad”.
Cruzado el ecuador del concierto llegaron “Cuando el Mundo se detuvo” en el que nos recuerdan estos dos años en los que muchas personas nos han dejado, “Albores de un nuevo comienzo” en el que se plantean como sería al mundo sin contaminación, para ir llegando al final con la aplaudida “Sigue Lloviendo”, para cerrar con “La dinámica del miedo” donde vimos a Luis e Iván bajarse entre el público a tocar.
Buena labor la de Vanagloria que hicieron todo lo posible con su experiencia y saber estar para hacer disfrutar de su actuación a sus fans.
Para el final de la tarde, llegaba el turno para la banda procedente de Hamilton (Canadá), Lutharö, que dentro de su gira europea estaba presentando su primer disco de estudio “Hiraeth”, que tanta expectación ha levantado.
Aunque ellos mismos se definen como Metal melódico, es más cercano ponerles una etiqueta de Thrash Death por la rapidez y la brutalidad de su música, la rabia de sus riffs, con las ásperas voces de su vocalista Krista.
Un show que abrían de una forma fulgurante con su brutal “To Kill Or To Crave”, donde ponían el sello de su música con la dualidad de las voces de Krista, el protagonismo de las guitarras de Victor y John y sus riffs y la base rítmica demoledora con Chris al bajo y el batería Cory Hofing que conocimos recientemente en la gira de sus compatriotas Striker a los que venía ayudando.
Sin tiempo para presentar las canciones se fueron sucediendo cortes, como la más oscura “Phanton” con su sobresaliente solo de guitarra, muy del gusto escandinavo, su más antiguo “Unleash The Beast” con Krista tirando de voces agudas, “Diamond Back”, con un sonido pobre que restaba energía a la propuesta positiva de la banda y que tenía complicidad por un público entregado frente al escenario.
Llegaba el momento de presentarse e interpretar la “What Sleeps In Your Mind”, que por momentos recordaban sus riffs a grandes de la escena Death Metal europea, pero con sonido Lutharo. Era el momento de su conocido “Wings Of Agony”, con esa intro más pausada para dar paso a ese juego de voces tan característico de la canción y donde Krista demuestra su poderoso registro vocal.
Regresábamos a su disco “Hiraeth” con la dinámica “Hopeless Abandonment”, con un público entregado a los canadienses, Krista tirando de agudos, voces melódicas, crudas, moviéndose por el menudo escenario de la Silikona.
Para el final “Lost In A Soul” y “Blood Lightning” que ponían cierre a su poderoso show, que se nos hizo corto y que a pesar de los problemas técnicos resultó convincente y entretenido.
En definitiva, Lutharo gustaron bastante por su música, puesta en escena y entrega. Una pena que no tuvieron el sonido que deseaban, pero hay que verlos más ocasiones para ver su verdadera medida.
- Crónica y fotos: gema@metaltrip.com & javier@metaltrip.com
- Fotos: olga@metaltrip.com
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