Metallica O2
Después del «One», siguió «Broken, Beat and Scarred» la cual dijo James Hetfield que como el nombre se las traía, la llamaban familiarmente BBS (o sea, in inglis, bi-bi-esss). Cuando le tocó el turno a ese tema llamado «Frantic», Hetfield lo anunció comentando que iban a tocar un tema del muy amado entre comillas «St. Anger», – menos mal que ya se han dado cuenta de que ese disco ha sido una cosa rara en su carrera porque la manera en que lo presentó, era bastante sarcástica. Pero vaya como les salió, como Dios, hasta me encantó a mí que cogí el St. Anger, lo dejé por ahí tirado y según llegué a mi casa lo he vuelto a escuchar a ver si le cojo el gusto.
Metallica O2 Trujillo
El último fichaje de la banda, o sea, Robert Agustín Trujillo (según Hetfield nada de llamarle Agustín que le sienta fatal), pienso que les ha dado una vida y una alegría a la banda, que les ha venido fenomenal. El Trujas no para, es una máquina y un espectáculo en sí mismo. Con esa cara de mono neardental, sus pintas y sobre todo su buen hacer con el bajo engancha al más pintado; con razón el Ozzy le fichó siendo jovenzuelo, después de haber despuntado con los Suidical Tendencies, no sabe ná. Además pienso que ha sido decisivo en las buenas relaciones que tienen ahora (por lo menos encima del escenario) del danés y de Hetfield porque ven que el público está con él y que atrae mucho por él mismo. Ojalá siga mucho tiempo en el grupo y no sufra un despido como alguno de sus predecesores.
Metallica O2 Lars 4
Metallica O2 Kirk 2
Cuando le tocó el turno a «Whenever I may roam», nos dimos cuenta que la batería empezaba a girar despacio un cuarto para que la gente del lado izquierdo pudiera ver los movimientos del Ulrich (así pasó sucesivamente, dando el giro de 360º para que todo el público en algún momento tuviera de cara a Lars Ulrich), por cierto, ya no suena tanto a lata machacona, no suena como al principio de Metallica pero ya va dejando de parecerse a un bote de detergente aporreado, menos mal. Una de las veces hizo el burro y en mitad del concierto tuvo que retirarse a un lado ya que se cargó uno de los bombos, a ver si sigue así. Ese momento fue aprovechado para que Kirk Hammet nos deleitara con su guitarra marcándose un solo buenísimo, este pavo es de lo mejor. A continuación sonaron los acordes de mi adorada «For whom the bell tolls», temazo donde los haya pero el final lo cambiaron haciendo un batiburrillo raro que me dio la impresión de que al Ulrich se le había olvidado a qué lado tenía que atizarle; me pareció una cosa rara y que se dejaron el tema sin terminar, no sé, lo mismo me pilló tan alucinada que no me enteraba de nada. No se puede flipar tanto durante tanto tiempo que llega a ser malo.
Metallica O2 James 2
Metallica O2 Trujillo 3
Después de los arreglos varios, pudimos comprobar como el tema del último videoclip «The day that never comes» es una tralla impresionante, es la bomba, sonó increíble, madre mía qué tema les salió. Muchísimo mejor que en el disco, todo el mundo pensaba eso, aunque a medida que voy escuchando el «Death Magnetic» me va gustando más. A la maravilla de notas que tocaban le acompañaron unas luces de tonalidades verdes que eran fantasmagóricas, precioso todo. Como no estábamos lo suficientemente extasiados, llegó la apoteosis con el «Masters of Puppets» con todo el O2 como locos y entregado por completo a Metallica, para seguir con un «Blackened» como no lo he oído en mi vida – no hay palabras para describirlo. Para mí la mejor interpretación de la noche – se salieron. Ya ahí dijeron, vamos un ratito a descansar ya que están estos alucinados y así lo hicieron.
Metallica O2
Para ser sinceros, poco duró el descanso, todo el público no hacía nada más que implorar que salieran otra vez Metallica a las tablas del O2 Arena y de repente salieron con la interpretación del «Stone Cold Crazy» de lo más contundentemente y convincentemente interpretado, qué movimientos de cuello y pelo al viento teníamos todos o bueno, lo del pelo algunos, que bien es cierto que una parte del público era ya entradito en años. Cómo sonaban las guitarras, era una maravilla. Ya casi estábamos llegando al final pero todavía quedaba alguna sorpresa.
Metallica O2
Tras interpretar el «Jump in the fire», algo notamos los que estábamos espachurrados abajo y es que desde las alturas laterales del pabellón, empezaron a caer unos globos enormes negros con el logotipo guapo de Metallica que todo el público se dedicó a jugar con ellos. Caían desde todos los sitios, eso acompañado con el «Seek and Destoy» provocó avalanchas, empujones, golpes, caídas y de todo. Yo vi a uno aferrarse a uno de los globos para llevárselo de recuerdo y como otro menda no lo soltaba tampoco, empezó a morderlo cual piraña; qué miedo. Un poco burros sí son. Pués nada, la apoteosis final estaba servido y ya no había más cuerpo para seguir flipando. Más de dos horas y veinte de maravilla entre las maravillas. Siento daros envidia pero la vida es así de dura, pronto vendrán por España. Ya se rumorea que en la primavera del año que viene harán al menos dos fechas, estad atentos.
Los cuatro se despidieron entre fuertes aplausos; estos chicos (bueno, es un decir) se habían salido por los bordes – qué contenta me dejaron después de verles últimamente unas veces que me habían dejado contenta pero no con la boca abierta; gracias a Odin hoy sí. Metallicaaaaaaaaa – por cierto, nos vamos a USA a verlos o mejor esperamos? …..
Agradecimientos : a Guti BCN – te tengo en mis oraciones, a Jordi Visca el Barça, a Santi Requemei Forza Atleti (por cierto, que grande el Kun), Fernando Maiden (no se han tocado el Trooper, je je, pero que haces con esa camiseta?) y a Javi Metaltrip. Un besote, que conste que no se me ha pasado el subidón.
Crónica : rocio@metaltrip.com /// www.metaltrip.com
Fotos: Rocio & Javi
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