Con un año de retraso por problemas de salud de Dave Meniketti, Y&T se presentaba en Madrid para su gira de 45 aniversario. A pesar de que había competencia a nivel de conciertos (y cuando no es fiesta), Y&T es un caballo ganador y llegó a colgar el sold-out en su nueva visita. Había hambre de ver a los americanos, aunque bien es cierto que aunque no haya esa hambre, somos muchos los que de fijo iremos a un concierto del que siempre saldremos satisfechos. Y Y&T es esa banda.
Buen puesto de merchandising, con bastantes artículos con rango de precios no tan caro como otras bandas, aunque tampoco se podía decir que fuera un regalo.
La sala presentaba tan buen aspecto, que hubo que abrir la planta de arriba para no morir asfixiados. Señores de la But… no pasa nada por poner un poco el aire acondicionado. Que si, que buscan el consumo, pero se equivocan de cabo a rabo.
A la hora prevista, como en Y&T es habitual, las luces se apagaron y sin florituras ni intros de por medio, el cuarteto capitaneado por Meniketti y complementado por John Nymann a la guitarra, Mike Vanderhule a la batería y Aaron Leigh al bajo, la misma formación que nos visitó la última vez hace ya tres años, salió al escenario directamente con Hurricane ante una calurosa ovación al tiempo que en la pantalla trasera aparecía el legendario logo de la banda.
Pese a los sesenta y cinco años del señor Meniketti, no tuvo piedad con él mismo, y de una tacada siguió con Lonely side of town, Don’t stop running y uno de sus grandes hits, Black tiger ante un público cada vez más entregado. El sonido estaba siendo bastante bueno a nivel de voz, si bien los coros de Nymann y Leigh no se oían prácticamente nada.
La primera pausa llegó tras Black Tiger, donde Meniketti cogió el micrófono y anuncio que estábamos viendo la gira del 45 aniversario y que por ello nos iba a ofrecer al menos una canción de cada disco en estudio, ¿se cumpliría? De momento nos presentó la preciosidad de Come in from the rain incluida en el Ten de 1990. Seis minutos realmente preciosos en la que la gente estuvo más sosilla de lo previsto.
Para Meanstreak la reacción del público fue mucho mejor, y aún mejor tras el cambio de guitarra para Midnight in Tokyo tras tocar el inicio del tema y volverse la gente loca acompañando incluso con palmas. Al acabar el público no paraba de corear, y con razón, el nombre de la banda.
Face like an angel fue la primera concesión que se hizo del Down for the count. Meniketti volvió a su guitarra gibson con la que comenzó el concierto, y nos presentó un tema de su primer disco, quizá el que más vivió durante todo el show en la parte del solo, un Menikett realmente desbocado. La que menos aceptación tuvo fue Struck down, tema en el que dio paso a Nymann en la parte del solo, un Nymann, que parece escondido, pero qué bien le secunda.
En I want your money quedó más que patente que los coros no se oían nada de nada. I believe in you, como no podía ser de otra manera, está en otra liga, la de las imprescindibles y nos envolvió acompañándonos con luces de discoteca siendo una de las mejores acogidas, si bien yo disfruté mucho más con Han ‘em high, y es que el disco al que pertenece, Meanstreak es una joya lo mires como lo mires. De hecho, el parche de la batería de Vanderhule, es la portada de ese disco.
Nuevo cambio de guitarra y nos presentó 21st century con su inicio de bajo. Contagius no necesitaba presentación. Toda una fiesta al igual que Summertime girls. Se endureció la cosa con Rescue me, otra de las imprescindibles, pero es que con ese calificativo, en este grupo hay tantas… El concierto llegó a su fin ante de los bises con I’m coming home, pero sin irse del escenario, se dio paso a los bises y Meniketti nos presentó una de sus canciones favoritas de siempre, Sail on by, algo que el público no compartió a tenor de su reacción. Otra cosa fue el fin de fiesta, con la mítica Forever. La sala literalemente se cayó.
Todo un placer volver a Meniketti y sus Y&T, que además cumplió lo que dijo y toco al menos una canción de cada disco de estudio, algo que muchos anuncian pero que no cumplen, de manera que tocó un setlist más arriesgado que en otras ocasiones, pero muy agradecido. Seguramente volverán por Madrid en un par de años. Sea como sea, es una banda muy querida porque ante todo pone por delante su honestidad. Y&T siempre serán grandes.
Set list Y&T:
- Hurricane
- Lonely side of town
- Don’t stop Running
- Black Tiger
- Come in from the rain
- Meanstreak
- Midnight in Tokyo
- Fase like an angel
- Earthshaker
- Struck down
- I want your money
- I belive in you
- Hang ‘em High
- 21st Century
- Contagiuous
- Summertime girls
- Rescue Me
- I’m coming home
Bises:
- Sail on by
- Forever
Crónica y fotos: Fernando Leal Vielsa
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